Santísimo Cristo del Amor

En junio de 1948 la hermandad visita en su taller de la c/ San Cristóbal al imaginero ayamontino D. Antonio León Ortega, y le solicitan un presupuesto para la talla de todo el misterio, manifestándoles, que debido a la sobrecarga de trabajo, que tenia en aquellos momentos, no se podía comprometer a llevar a cabo tan complejo encargo.

Pero puso de relieve el gran interés que le despertaba la idea y que solo se comprometería a realizar la imagen del Santísimo Cristo del Amor, ya que quería aportar su granito de arena.

Días más tarde, presenta el correspondiente presupuesto que ascendía a la cantidad de nueve mil pesetas, imponiendo para dicha realización una única condición y es que la hermandad se hiciera de la madera de ciprés necesaria para tal fin, ya que era la más idónea, para que no se viera nunca afectada por la carcoma.

Por aquella época, se estaba llevando a cabo la labor de monda de la vieja necrópolis de San Sebastián, por lo que expuesto el caso, al entonces Alcalde de Huelva, D. Pedro Pérez de Guzmán y Urzaiz, entusiasmado por la iniciativa, extendió una autorización, para que por parte de D. Antonio León Ortega fuera seleccionado el árbol, que estimara más oportuno, para que a la siguiente tarde se llevara a cabo la operación de elección, talado y troceado de un monumental ejemplar, siendo trasladado al taller, donde permaneció varios meses, hasta conseguir su total y perfecto secado.

Ya en la primavera de 1949, el trabajo incansable de su genial gubia, fue transformando aquel extraordinario tronco. La imagen totalmente terminada llegaría a la hermandad, en el mes de octubre del mismo año.

El Domingo 25 de febrero de 1951, fue bendecida la imagen del Santísimo Cristo del Amor, que vestía una túnica blanca y un mantolin azul pavo real, ceñido con fajín hebreo, dicho acto tuvo lugar a las diez de la mañana y aparecía bajo un dosel rojo en un artístico altar levantado en el presbiterio y ricamente exornado con gran profusión de flores, luces y atributos propios, ofreciendo un aspecto deslumbrador.

La imagen del Santísimo Cristo del Amor, tallada en madera de ciprés, estucada y policromada, es de vestir, de talla completa, y mide 1,70 metros, más 6 centímetros de peana. El Señor, con el paño de pureza tallado a base de pliegues levemente marcados y cruzados por delante, adelanta la pierna izquierda, y sostiene el cuerpo con la derecha.

Con la mano izquierda sostiene el pan de la Eucaristía y con la derecha bendice a la griega. El rostro muestra los rasgos típicos de su autor, que imprimía a la faz de Jesús un carácter dulce y dramático a un tiempo, y ciertamente aceitunado en su policromía. La nariz es aguileña, los ojos rasgados, los pómulos salientes, la frente estrecha, y la barba partida en dos.

Una vez terminada la bendición que fue ofrecida por el director espiritual de la hermandad y cura párroco del Sagrado Corazón de Jesús D. Pablo Rodríguez González, dio comienzo la Función Principal de Estatutos, actuando de celebrante dicho párroco, asistido por D. Alejandro Cano Rincón y D. Juan de la Cruz Bocardo, diácono y subdiácono respectivamente.

Por último se celebró un devotísimo besapiés al Santísimo Cristo del Amor, que resultó brillantísimo.

Saldría por primera vez el Domingo de Ramos 18 de marzo de 1951.

En 1988, D. José Antonio Díaz Roca efectuó una restauración que afectó a la sujeción de la peana, así como subsanar varias grietas a lo largo de la imagen; trabajo principalmente de conservación.

En el 2004, fue D. Antonio Bernal el encargado de restaurar la Sagrada Imagen del Señor, renovando su policromía, resanando grietas y ensambles abiertos y construyendo una nueva peana de cedro.